martes, 18 de marzo de 2014

Puente Romano de Córdoba.

El puente romano de Córdoba, está situado sobre el río Guadalquivir, entre la Puerta del Puente y la Torre de Calahorra, une el Bario del Campo de la verdad con el Barrio de la Catedral. También es conocido como "el Puente Viejo". El 9 de Enero de 2008 se inauguró la mayor remodelación de este. 




Se construyó a principio del siglo I d.C., mide 331 metros de longitud y 9 metros de ancho y esta compuesto por los dieciséis arcos de los diecisiete que lo componían originalmente; de todas las ocasiones en las que ha sido restaurado la ultima fue la mas polémica por el uso de mármol rosa en el pavimento y por la eliminación de los antiguos pretiles. Es un puente característico de estar constituido por arcos. Construido con piedra. Ha sido víctima de muchas guerras y revueltas. Era el único punto por el que se podía cruzar el río Guadalquivir sin necesidad de tomar embarcación. Este puente formó parte de la Nacional IV hasta que el 1 de mayo de 2004 se cerró el tráfico definitivamente y empezó a ser un puente de uso peatonal.




Puente Romano de Córdoba antes de su remodelación 
Puente Romano de Córdoba después de la remodelación



En la mitad del puente se eleva una escultura al custodio de la ciudad, San Rafael. Siempre esta llena de flores y velas de los cordobeses que le dan gracias por haber salvado a la ciudad de la gran epidemia de peste.

Estatua de San Rafael (1651)


El arco apareció en Mesopotamia, en la civilización del Valle del Indo, Egipto, Asiria, Etruria y mas adelante en la Roma Antigua. Es el elemento constructivo en forma curvada o poligonal que salva el espacio entre dos pilares o muros. El arco se utilizó para las estructuras subterráneas y de drenaje y fueron los romanos los primero en usarlos en la superficie, aunque se pensaba que los romanos aprendieron su uso de los etruscos. El denominado arco romano es de forma semicircular y esta construido a partir de un numero impar de dovelas (piezas hechas de piedra tallada, ladrillo o adobe), se necesita un numero impar de estas para que haya una dovela central o clave. Las dovelas pueden adoptar formas curvas diversas trabajadas siempre a compresión.

Existe una tendencia de empuje de los lados del arco hacia fuera que debe ser contrarrestada por un mayor peso de albañilería para empujarlo hacia adentro. El arco semicircular puede ser aplanado para hacer un arco elíptico. Los romano usaron este tipo de arco semicircular en muchas de sus estructuras tradicionales, como acueductos, palacios y anfiteatros.

En la Edad Media el arco se convirtió en una importante técnica de construcción de catedrales y todavía se usa hoy en día en algunas estructuras como los puentes.




Arco del puente de Córdoba
















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